En medio de crecientes críticas y preocupaciones ciudadanas sobre la refinería de Cadereyta, el gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, expresó este martes su frustración ante la aparente falta de respuesta por parte de la federación a las solicitudes y preocupaciones del estado.
El mandatario señaló que durante los últimos dos meses, han intentado comunicarse con el director de la refinería, Martin Rodríguez Aboites, así como con la Secretaría de Energía y el presidente Andrés Manuel López Obrador, sin recibir respuesta alguna a las solicitudes de audiencia.
En este contexto, García destacó la necesidad de establecer un frente común con los legisladores para modificar la Constitución y convertir el tema de hidrocarburos en un asunto concurrente, permitiendo que tanto el estado como la federación tomen acciones conjuntas en favor del aire limpio.
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"Si fueran astutos, en enero la refinería debería presentar un programa de reducción y decir que están colaborando, mostrando los filtros prometidos, y demostrar a la ciudadanía que están a favor del aire limpio.
"Hicieron todo lo contrario, llegó enero, se sordearon, no contestaron, va medio ambiente, intenta clausurar, nos ponen militares para que no entremos, alegan independencia por ser entidad federal y no nos dejan entrar", expresó Samuel García.