A pesar de que 82 empresas se sumaron al Plan Integral de Gestión Estratégica de la Calidad del Aire (PIGECA) en Nuevo León, la refinería de Cadereyta, perteneciente a Pemex, no se adhirió al plan diseñado para reducir la contaminación atmosférica en la región, según informó Alfonso Martínez Muñoz, secretario de Medio Ambiente del estado.
Martínez Muñoz destacó que, aunque Pemex no se unió al PIGECA, el gobierno estatal continuará apoyando a la refinería a través de la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente y la Semarnat. El enfoque principal será la aprobación de inversiones ambientales, incluida la implementación de plantas desulfuradoras para reducir las emisiones de dióxido de azufre generadas por la refinería.
"En el caso de la refinería, sabemos lo que se tiene que hacer, inversión en plantas desulfuradoras, mantenimiento de las mismas. No viene ahí, no está todavía, seguimos en conversaciones con ellos", indicó Martínez Muñoz.
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Además, se señaló que el tratamiento del combustóleo generado por la refinería en la entidad contribuirá significativamente a la reducción de desechos liberados a la atmósfera mediante la instalación de una planta coquizadora.
Estas declaraciones surgen tras la presentación del PIGECA, donde se reveló que las fuentes contaminantes fijas federales, en particular la refinería de Pemex, son responsables del 98 por ciento del dióxido de azufre presente en el aire de la región metropolitana de Monterrey, según el inventario de emisiones.