En los últimos 20 años más de 100 trabajadores de la comunicación han sido asesinados, 31 se encuentran desaparecidos y más de 160 familias siguen esperando justicia, verdad y reparación de los daños, según Reporteros Sin Fronteras (RSF).
Esta realidad, ha sido constatada de igual manera por Artículo 19, cuyas cifras ponen en la balanza a 166 periodistas que fueron victimados dentro del ejercicio de sus labores, desde el año 2000 a la fecha.
Los pronósticos apuntan a que, el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, podría ser el más violento contra comunicadores y periodistas, al tener a 46 de estos profesionistas ultimados, más 5 que se encuentran en calidad de desaparecidos.
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La última víctima fue Víctor Alfonso Culebro Morales, periodista y director del periódico Realidades, quien fue hallado sin vida en la carretera Ocozocoautla-Arriaga, Chiapas. Era hijo del exsecretario general de Gobierno de Chiapas, Mario Carlos Culebro Velasco.
Esto pone en perspectiva el récord sangriento durante el mandato del expresidente Felipe Calderón, (2006-2012) donde fueron privados de la vida un total de 48 comunicadores.
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Además, de acuerdo con Amnistía Internacional, ocho periodistas mexicanos fueron asesinados mientras estaban inscritos en el Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas federal del Gobierno en los últimos siete años.
La violencia en México y el atentado a la información
Cabe destacar que, 67 periodistas fueron asesinados en todo el mundo, en 2022, de los cuales, cerca de la mitad murieron en Latinoamérica, y 17 de ellos en México.
“México no puede seguir presenciando el asesinato de sus periodistas, no puede seguir presenciando la estigmatización de sus periodistas, no puede seguir poniendo en riesgo la libertad de prensa”, resaltó Balbina Flores de (RSF).
México, uno de los países más mortíferos para ser periodista
México es comparado como una zona de guerra al momento de ejercer el periodismo, pues estuvo dentro del ranking de los países más mortíferos que llevan a cabo esta profesión, como lo es también Ucrania, Palestina y Afganistán.
El asesinato de periodistas es considerado como un ataque a la democracia, ya que se “violan los derechos de las personas y las sociedades a buscar y recibir información e ideas de cualquier tipo”.