El abuso de sustancias al conducir es una problemática que acecha a la población mexicana desde hace tiempo. Ya por 2022, la Secretaría de Salud del Gobierno de México a través de su Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), revelaba a través de un comunicado que "los accidentes automovilísticos asociados al consumo de alcohol son un problema de salud pública que afecta principalmente a personas de 20 a 39 años".
Con este panorama, los expertos que integran este organismo refuerzan la importancia de medidas estrictas como el alcoholímetro, que "en los conductores inhibe el abuso en el consumo de bebidas alcohólicas". Este tipo de modalidades restrictivas han probado ser útiles a la hora de reducir daños: "la evidencia muestra que esta acción ha contribuido a disminuir 20 por ciento los accidentes de tránsito", señalan desde la Conadic.
¿Qué consecuencias tiene conducir alcoholizado?
De acuerdo con la entidad gubernamental, las bebidas alcohólicas afectan gravemente nuestra capacidad de manejo dado que "reducen el campo visual, los reflejos, producen estado de euforia y exceso de confianza, apreciación errónea de las distancias y de la velocidad, aumento de agresividad e irritabilidad, falta de percepción de señales de tránsito y luces de semáforos u otros vehículos, y aumento de sensibilidad a deslumbramientos, entre otros".
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Es por eso que el gobierno mexicano busca alcanzar los objetivos dispuestos en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde numerosos países se comprometieron a reducir, por lo menos, un 50 por ciento el número de muertes por accidentes de tránsito.
¿Cuál es la multa por manejar en estado de ebriedad en CDMX?
En el ámbito de la Ciudad de México, el límite de alcohol permitido es de 0.8 gramos por litro en la sangre o 0.4 miligramos por litro en aire espirado. Si una persona es detenida con un nivel mayor, deberá pagar una multa por 60 UMA, es decir más de 6 mil pesos.
Asimismo, la ley contempla otro tipo de sanciones, que pueden ir desde el arresto administrativo incomutable de 20 a 36 horas, seis puntos de penalización a la licencia de conducir o, incluso, hasta la remisión del auto al depósito vehicular. La penalización dependerá de la gravedad de infracción cometida por el conductor.
Más allá de las cifras permitidas, los expertos sugieren que quien vaya a consumir una bebida alcohólica, busque a otro conductor designado que se haga cargo del manejo, con fines de prevenir cualquier riesgo.