Tras el anuncio de que el juego de fútbol americano de la NFL, que estaba programado para el 19 de noviembre en el Estadio Azteca, cambio de sede a Los Ángeles por las malas condiciones del césped, el Gobierno de la Ciudad de México lamentó la decisión y reconoció que este suceso “debe servir como experiencia a todos los involucrados en el deporte para que en el futuro jamás se vuelva a cancelar un evento”.
En una tarjeta informativa, el director general del Instituto del Deporte capitalino, Horacio de la Vega, aseguró que ya se tenían listos los operativos de vialidad, protección civil, seguridad, salud, entre otros.
En la presentación del partido de la NFL, las autoridades anunciaron que esperaban una derrama económica de 45 millones de dólares directos, más 250 millones de pesos en impacto económico, los cuales se perderán.
La NFL y el Gobierno capitalino tienen un convenio para que un partido se realice en la ciudad, el cual tiene vigencia hasta el 2021.