Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena presentó su renuncia al cargo de ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el cual asumió el 27 de noviembre de 2012.
En una carta dirigida a los senadores, el juzgador aseguró que está decisión no implica una aceptación tácita de la constitucionalidad de la reforma judicial, toda vez que procede conforme a la presunción de validez que toda norma merece mientras no sea revocada por un tribunal competente.
Mencionó que por respeto a la Constitución que juró defender, su renuncia surtirá efecto el 31 de agosto de 2025, motivo por el cual hasta ese día, continuará cumpliendo sus responsabilidades con la misma integridad que ha intentado mantener desde mi primer día.
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Indicó que renuncia no como quien abandona una tarea inconclusa, sino como quien entiende que los cargos públicos son préstamos temporales, conferidos para ser desempeñados con decoro.
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Refirió que el único lujo que se permite al dejar el puesto es hacerlo con la serenidad de haber sido fiel a los principios constitucionales que guían esta labor.
Al final, dijo Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, el verdadero triunfo no es aferrarse al cargo, sino saber cuándo dejarlo con gracia, consciente de que nadie es indispensable, solo libre.