Trabajadores del Poder Judicial, y estudiantes de Derecho de distintas instituciones educativas del país, exigieron a la presidenta Claudia Sheinbaum rectificar la reforma judicial y abrir el diálogo para frenar los efectos negativos que tendrá en el sistema judicial mexicano.
Tras realizar una marcha del Monumento a la Revolución al Ángel de la Independencia, alrededor de 5 mil personas aseguraron que la reforma es una venganza del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
“La reforma constitucional impulsada por el anterior presidente, el señor López Obrador, no fue una reforma para mejorar el acceso a la justicia. Fue una venganza. Fue un ataque contra quienes hicimos lo correcto: defender la Constitución, impedir que se cometieran actos contrarios a la ley, proteger los derechos humanos de los ciudadanos. Ahora, con un mes de paro laboral, nuestro mensaje sigue siendo el mismo: la justicia no puede someterse a los caprichos del poder político”, sostuvo la juez Juana Fuentes.
Te podría interesar
Bajo consignas como !arriba la justicia, abajo la reforma!, ¡ el poder judicial está de pie!, ¡Claudia escucha a los estudiantes y su lucha! !Somos tres poderes, y este no se vende! !el Poder Judicial no va a caer, está de pie!, lanzaron un llamado a la mandataria.
“Desde esta tribuna, hacemos un llamado respetuoso pero firme a la presidenta Claudia Sheinbaum. Sabemos que entiende lo que está en juego. Hacemos un llamado al diálogo, un diálogo que coloque en el centro la preservación de la independencia judicial, que no se destruya la carrera judicial, que se respeten los principios que garantizan que los ciudadanos, las empresas, y las futuras generaciones tengan una justicia imparcial. Esta no es una lucha para mantener privilegios y usted lo sabe; es una lucha por la estabilidad y el progreso de la nación”, dejaron en claro.
Te podría interesar
Ahora, dijo, que los ojos del mundo estuvieron en su toma de posesión, la exhortaron a reflexionar sobre lo que significa liderar un país en donde los jueces ya no pueden actuar con libertad.
“El llamado es concreto: abrir mesas de diálogo en las que los propios juzgadores y trabajadores expliquemos los riesgos de desmantelar la justicia. Nos ofrecemos incluso a participar en mejorar la reforma, nadie mejor que los que hoy estamos aquí sabemos de lo que adolece y que es mejorable. Pero nadie de los que estamos aquí haría este ofrecimiento colaborativo, de poder a poder, si fuera para mantener privilegios”, señaló.
Consideran los trabajadores del Poder Judicial que es muy probable que la presidenta haya sido mal informada por quienes buscan centralizar el poder a expensas del sistema de justicia.
“La verdadera democratización del Poder Judicial no puede venir de la mano de medidas que socavan la experiencia y profesionalismo de los jueces, ni de reformas que afecten los derechos laborales de quienes sostienen este pilar de nuestra democracia”.
Advierten que los efectos de esta reforma, generarán una profunda crisis en la justicia mexicana, “y es por ello que le hacemos un llamado a revisar y corregir los graves efectos que esta reforma tendrá para nuestra democracia”.