Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara, continuará hospitalizado hasta que las autoridades del Hospital Adolfo López Mateos autoricen su salida.
El llamado Narco de Narcos interpuso ayer un juicio de amparo para impugnar la orden de traslado de dicho nosocomio al penal federal del Altiplano sin que se haya restablecido de la cirugía urológica a la que fue sometido.
Juan Miguel Ortiz Marmolejo, titular del Juzgado Noveno de Distrito en materia de Amparo y Juicios Federales con residencia en Toluca, Estado de México, le concedió la suspensión de plano a Caro Quintero, para el efecto de que no sea trasladado al centro de reclusión.
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El impartidor de justicia argumentó que la medida cautelar tiene el propósito de evitar consecuencias irreversibles en su salud o la pérdida de su vida.
Asimismo, dio un plazo de 24 horas para que las autoridades informen acerca de la forma y términos en que haya dado cumplimiento a la medida cautelar, agregando a dicho informe copia certificada de las constancias respectivas.
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Cabe recordar que el pasado miércoles, Rafael Caro Quintero fue trasladado del penal del Altiplano al hospital para recibir atención médica por una hipertrofia de próstata grado IV que le fue diagnosticada por médicos especializados.
En el mes de julio, las autoridades penitenciarias iniciaron los trámites para que el capo sinaloense recibiera la atención médica requerida, luego de que se le detectó un problema en la próstata, que padece desde hace 20 años.