POLÍTICA

Rechaza diputada federal del PAN sanción del Tribunal por violencia política de género

Advierte la diputada Teresa Castell que acudirá a las instancias internacionales si Tribunal ratifica sanciones en su contra

Teresa Castell, diputada federal del PAN.
Teresa Castell, diputada federal del PAN.Créditos: Twitter / Teresa Castell
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En la Cámara de Diputados, la integrante de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), Teresa Castell, sancionada por violencia política de género contra la también diputada federal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Salma Luévano, advirtió que no admite la resolución en su contra, emitida por la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). 

La legisladora indicó que ya impugnó el fallo y si la Sala Superior del Tribunal insiste en calificarla como una agresora por violencia política de género, se defenderá en las instancias internacionales.  

“No, por supuesto que no la voy a aceptar, porque no estamos en igualdad de circunstancias de ninguna manera, no lo voy a aceptar, me voy a las instancias internacionales”, sentenció.

Aseguró que el uso de las leyes a favor del combate a la violencia de género, en contra de las propias mujeres, es ilegal y excesivo.

Sentenció que la política de igualdad de género impulsada desde el Gobierno Federal y la mayoría en el Legislativo tiene el fin de “borrar” a las mujeres, que pierdan sus derechos y que el “patriarcado transformado” se afiance en el país.

Lo anterior, a raíz de la resolución emitida en su contra por la Sala Regional del Tribunal Electoral, en la que fue encontrada responsable de violencia política de género, cometida contra la también diputada federal trans de la bancada morenista, Salma Luévano. 

Avance de la ideología progresista es un “retroceso”: Castell

Acompañada por representantes de organizaciones sociales y conservadoras que le expresaron su apoyo, la diputada Castell De Oro calificó como un retroceso para los derechos de las mujeres, el avance de la ideología progresista de género. 

Sentenció que conforme a esa política, resultará que ser mujer es un “delito”, y con el argumento de la igualdad, a unos cuantos se les permitirá “decir” o hacer “lo que sea” y a las mujeres que defienden su condición biológica, mantenerlas “sumisas”.

Reclamó el fallo del Tribunal en su contra, al asegurar que sus derechos como legisladora federal, amparan su libertad de hablar, legislar y actuar, sin ser reconvenida. 

Sentenció que la ideología de género también promueve los discursos de odio hacia las mujeres que expresan su postura contra las personas trans. 

Defendió la inviolabilidad de su derecho a informar a la población sobre los riegos que corren mujeres y niños sujetos a las presiones de la ideología trans. 

Revertir legislación a favor de la ideología trans 

La legisladora panista anunció que solicitará a la Junta de Coordinación Política de la Cámara, para revisar los riesgos de la legislación llamada “progresista” en materia de igualdad de género, pero que está atropellando los derechos de las mujeres. 

Se pronunció a favor de que esa normativa garantice la paridad, pero “biológica”, no ideológica. 

Dijo que el “progresismo” de Morena es peligroso, porque está “borrando” a las mujeres al imponer la clasificación de “personas”. 

Manifestó que en el Legislativo, no se puede consentir que las “minorías” sigan definiendo ni imponiendo leyes sustentadas en ideologías. 

Reiteró que seguirá luchando “contra el borrado del sexo en las actas de nacimiento”.

Alertó que el “progresismo” que está ejerciendo el partido Morena, genera caos social.