La Comisión Permanente del Congreso de la Unión condenó enérgicamente los hechos ocurridos el pasado sábado en las instalaciones del Consulado General de México en Nueva York, donde un grupo de manifestantes gritó consignas racistas y repartió panfletos en contra de la comunidad migrante mexicana.
En un pronunciamiento, diputados y senadores resaltaron las aportaciones de los mexicanos en la economía de Estados Unidos, así como sus contribuciones a las comunidades en las que residen.
Además, hicieron un llamado a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que refuerce las actividades de protección en sus 50 consulados en Estados Unidos, con el objeto de ofrecer asistencia legal a inmigrantes mexicanos que sufren discriminación de cualquier tipo.
Los legisladores urgieron también a la comunidad internacional y a los organismos internacionales defensores de derechos humanos a condenar los actos discriminatorios sufridos por la comunidad mexicana y abogar por detener la política migratoria del vecino país del norte.
El pronunciamiento se hará llegar a los representantes de organismos y parlamentos internacionales, así como a las dos cámaras del Congreso de los Estados Unidos y a la Secretaria de Relaciones Exteriores de nuestro país, a fin de que lo haga extensivo a las embajadas y consulados.