Poco antes de las cuatro de la tarde de este lunes, un edificio residencial de seis pisos en el área Morris Heights, en el barrio del Bronx, en Nueva York, Estados Unidos, se derrumbó parcialmente, cayendo la esquina del edificio a la calle.
Testigos han reportado que en la planta baja de esta construcción existe una bodega desde la cual se escuchó una fuerte explosión previo a que un costado del edificio se desplomara.
Hasta el momento, el departamento de bomberos de NY no ha emitido reporte de personas lesionadas, aunque la comisionada de dicho departamento indicó en las redes sociales que los bomberos estaban concentrados buscando aun entre los escombros a personas que pudieran estar atrapadas.
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Al lugar del accidente se presentaron todas las autoridades de seguridad de la ciudad, comenzando por el alcalde de Nueva York, Eric Adams, así como los comisionados de la policía y los bomberos coordinando las labores de limpieza y rescate.
Aclararon, por cierto, de algunas violaciones al reglamento de construcción y operación por parte de la bodega, así es que muy pronto llegarán las multas para los dueños.
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Apenas en marzo, se reportó un edificio que se colapsó en el bajo Manhattan, el cual era utilizado como estacionamiento.
Todos los pisos en aquella ocasión se vinieron y tuvieron que pasar varios días para que las cosas volvieran a la normalidad.
Muchos de estos edificios, incluyendo al que se desplomó la tarde de hoy en el Bronx, son construcciones hechas en la primera mitad del siglo pasado y en ocasiones no reciben el mantenimiento adecuado que las tenga en condiciones óptimas.
Muchos de los edificios neoyorquinos cuentan con paredes de tablaroca, un material muy socorrido que ayuda con los climas extremos, pero que también facilita los accidentes.