El siglo pasado fue testigo de muertes e infecciones a causa de un misterioso virus, nadie podía explicarse por qué un número creciente de jóvenes homosexuales, en su mayoría, estaban enfrentando la muerte a causa del síndrome de inmunodeficiencia adquirida, sida. Esto orilló a científicos a investigar sobre esta enfermedad, uno de ellos fue la doctora Radka Argirova, quien, contra toda opinión, contrabandeó VIH a su país para su estudio.
Aparición y desconocimiento del VIH
En 1981 se reconoció al sida como una nueva enfermedad, y solo 4 años más tarde, una ola de muertes y enfermedades azotaba a la humanidad a causa de este síndrome. Las personas de diferentes países se encontraban asustadas ante desconocimiento, por lo que se lanzaron varias campañas para informar a la población.
Lo poco que se sabía sobre el sida es que afectaba también a gente que hacía uso de drogas intravenosas, por lo que el contagio se daba por medio de transfusiones de sangre. Esta condición exponía a quienes padecían infecciones y enfermedades alternas, pues el sida terminaba por eliminar la resistencia de los pacientes, dejando consecuencias catastróficas.
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Algunos años más tarde se daría con la consecuencia de ello, se trataba del virus de inmunodeficiencia humana (VIH).
Radka Argirova, la científica que pasó el VIH a su país
Bulgaria en aquel entonces era un régimen comunista demasiado controlado, el país negaba no reconocía la amenaza minimizándola, describiéndola como una “enfermedad gay” que solo se encontraba en Occidente. Esto se pregonaba al mismo tiempo que estudiantes extranjeros y marineros estaban muriendo en los hospitales de esa nación.
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La doctora Radka Argirova trabajaba en un instituto de investigación de alto perfil en la capital de Bulgaria, y contrario a lo que opinaba su país, a ella sí le interesaba develar el secreto detrás de las muertes referentes a este nuevo síndrome.
¿Cómo es que se pasó VIH a Bulgaria?
En un viaje a Alemania, Argirova pasó VIH a Bulgaria en frascos del tamaño de un celular moderno de aquel entonces. Las células alcanzaron a sobrevivir: "Tomé las pequeñas botellas, las puse en mi bolso y viajé a Frankfurt, donde tomé el vuelo a Sofía", declaró la doctora a la BBC.
"Hubo mucha bulla al respecto en los periódicos y había personas que no estaban muy contentas con el hecho de que nosotros en el instituto teníamos el virus. Algunos tenían miedo, no sé por qué, y otros, tal vez, algo de envidia", exclamó luego de haber introducido el virus a su país.
Contra todo pronóstico, cuatro años después le dieron a la doctora Radka Argirova la autoridad de educar al público búlgaro sobre el VHI y el sida, además de seguir trabajando en el tema.
Actualmente, la científica que pasó el VIH de contrabando a su país para estudiarlo es una de las virólogas más importantes de Bulgaria. Cabe decir que es una de las expertas sobre el estudio de covid 19 más reconocidas de su país.