Mientras los ataques arrecian en la capital de ucrania, que volvió a amanecer en llamas en zonas residenciales, también caen misiles en la ciudad de Járkov, que no tiene descanso desde el inicio de la guerra, igual que Mariúpol, en el sureste del país, donde según las autoridades ucranianas en las últimas horas el ejército ruso tomó como rehenes a 400 personas en un hospital entre pacientes, doctores y personal sanitario.
Las autoridades de la ciudad también informaron que al menos 2 mil personas habían logrado escapar en un corredor humanitario, algo que no había podido suceder en días previos, debido a los enfrentamientos y bombardeos.
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Mariupol es clave en la estrategia del kremlin por crear un corredor entre la zona ocupada del Donbas y Crimea, la península anexionada en 2014, también con el objetivo de llegar hasta Odesa.
Por otro lado, las tropas rusas siguen avanzando y asediando la ciudad de Mikolayiv, que se encuentra a sólo 130 kilómetros de Odesa.
Conocida como la joya del mar negro, Odesa también es clave ya que es la última salida que le queda a ucrania al mar que está bajo control del gobierno ucraniano.
Además, por estos puertos, sale el 70% de las exportaciones y el 90% de la producción agrícola de este país; para ucrania es clave mantener esta posición, al igual que para Rusia conquistarla.
Cabe destacar que esta ciudad tiene una enorme carga emocional, cultural e histórica para los rusos, con lo cual muchos ciudadanos de Odesa creen que no la bombardearán porque sería como estar bombardeando en su propia casa.