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Adrián Marcelo revela que reprobó examen psicométrico y usó ‘palancas’ para entrar a Psicología

Adrián Marcelo confesó que entró a la Facultad de Psicología tras reprobar examen psicométrico, gracias a las "palancas" de su padre.

Créditos: La Casa de los Famosos México
Escrito en ENTRETENIMIENTO el

Adrián Marcelo, conocido por su participación en la segunda temporada de "La Casa de los Famosos México", ha causado nuevamente controversia con una reciente confesión sobre su ingreso a la universidad. 

El presentador regiomontano, famoso por su estilo de humor negro y comentarios controvertidos, reveló durante una conversación en el reality que recurrió a influencias para ingresar a la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), tras reprobar el examen psicométrico de admisión.

Durante una charla con sus compañeros del Cuarto Tierra, Adrián Marcelo admitió que no fue aceptado en su primer intento para estudiar Psicología en la UANL. A pesar de haber aprobado el examen de conocimientos generales, el conductor no superó el examen psicométrico, diseñado para evaluar si los aspirantes cuentan con el perfil emocional y psicológico adecuado para la carrera. La razón: los resultados indicaron que era propenso a cambios bruscos en su estado de ánimo, lo cual fue considerado un rasgo incompatible para un futuro psicólogo.

Ante esta situación, Marcelo confesó que fue su padre, utilizando influencias dentro de la universidad, quien logró asegurar su lugar en la facultad. 

Esta revelación generó indignación en redes sociales, donde muchos cuestionaron la ética de acceder a la educación superior mediante "palancas".

¿Por qué no ejerció como psicólogo?

Aunque Adrián Marcelo logró obtener su título en Psicología, decidió no ejercer la profesión. En una entrevista con Fernando Lozano hace un año, el conductor explicó las razones detrás de su decisión de abandonar la psicología. 

Durante sus prácticas profesionales en el Hospital Muguerza, vivió una experiencia que lo llevó a reconsiderar su futuro en esta área. 

Marcelo relató que, tras un festival de música donde consumió sustancias, experimentó un episodio de ansiedad mientras realizaba sus prácticas. 

“Empieza una temblorina, me tocó la frente y estoy sudando frío. Cuando salgo para el pasillo viene entrando la jefa del departamento y me ve en un estado que sabía que me estaba pasando algo", comenta. 

Este evento, combinado con una falta de pasión por la rutina de oficina, lo llevó a la conclusión de que la psicología no era su verdadera vocación; poco después, su contrato de prácticas no fue renovado. 

"Me di cuenta de que jamás quería crecer o convertirme en director de Recursos Humanos. No porque no estuviera dispuesto al sacrificio, sino porque no me apasionaba tanto la labor de oficina", comentó Adrián Marcelo.