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Pasos clave para construir tu colchón financiero, según Profeco

Siguiendo estas recomendaciones de la Profeco, podrás construir gradualmente un colchón financiero sólido que te brindará mayor seguridad y tranquilidad en tu vida financiera.

El colchón financiero se enfoca en los gastos que ya tenemos contemplados en nuestro presupuesto
El colchón financiero se enfoca en los gastos que ya tenemos contemplados en nuestro presupuestoCréditos: Freepik
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En un mundo lleno de incertidumbres económicas, la importancia de contar con un respaldo financiero se ha vuelto cada vez más evidente. Muchos hemos escuchado hablar sobre fondos de emergencia, pero existe otro concepto igualmente crucial: el colchón financiero

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) de México ha puesto énfasis en este tema, ofreciendo valiosas recomendaciones para que los consumidores puedan construir su propio colchón financiero y así enfrentar con mayor tranquilidad los desafíos económicos del día a día.

¿Qué es un colchón financiero?

Pero antes, es importante entender que, el colchón financiero, según la Profeco, es una herramienta financiera distinta al fondo de emergencias. Mientras que este último está destinado a cubrir gastos inesperados, el colchón financiero se enfoca en los gastos que ya tenemos contemplados en nuestro presupuesto. Es decir, se trata de un monto de dinero reservado para hacer frente a los gastos regulares y previsibles, proporcionando una mayor estabilidad financiera y reduciendo el estrés asociado a las fluctuaciones en los ingresos o a períodos de dificultad económica.

¿Cómo construir tu colchón financiero, según Profeco?

Ahora bien, para crear el tuyo, la Profeco ofrece una serie de recomendaciones prácticas para construir un colchón financiero sólido:

  1. Elabora un presupuesto: El primer paso es determinar cuánto puedes destinar a tu colchón financiero. La regla general es mantener suficiente para cubrir entre 3 y 6 meses de tus gastos más importantes.
  2. Programa tus ahorros: Configura transferencias automáticas desde tu cuenta corriente a una cuenta de ahorros, ya sea quincenal o mensualmente, para acumular dinero sin tener que estar pendiente.
  3. Prioriza tu colchón financiero: Después de cubrir tus gastos fijos, separa el dinero para el ahorro antes de gastarlo en otras áreas.
  4. Divide tus gastos: Utiliza el método de los sobres, asignando dinero a diferentes categorías de gastos para mantener un mejor control.
  5. Invierte sabiamente: Infórmate sobre instrumentos de inversión seguros y con buenas ganancias para hacer crecer tu dinero.
  6. Administra tus ingresos: Aplica la técnica 50/30/20, destinando el 50% de tus ingresos a necesidades básicas, 30% a gastos prescindibles y 20% al ahorro.