El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, se reunió este jueves con su homólogo de Estados Unidos, Rick Perry, para sostener un diálogo franco sobre los temas de la “robusta” agenda bilateral, los cuales son clave para fortalecer la seguridad energética e impulsar la competitividad.
En un mensaje a medios, el funcionario mexicano destacó que en este encuentro se acordó llevar a un nuevo nivel la relación bilateral en la materia para generar beneficios mutuos y nuevas oportunidades.
Coldwell destacó que gracias a la reforma energética y como resultado de las cinco licitaciones petroleras y las dos subastas eléctricas, las inversiones de las empresas estadounidenses alcanzan los 7 mil 500 millones de dólares.
Por su parte, el ex gobernador de Texas destacó que la prosperidad de México está ligada a la de Estados Unidos; por ello, enfatizó que la construcción de una nueva industria energética requiere del trabajo conjunto.
Asimismo, destacó la necesidad de mejorar los vínculos para dar beneficios económicos a los habitantes de los tres países.
Para alcanzar los objetivos trazados, los funcionarios delinearon un plan de tres puntos que comprenden: ampliar la infraestructura energética transfronteriza y promover las inversiones; ampliar y reforzar las interconexiones eléctricas, e incrementar la cooperación para estimular la innovación, el desarrollo tecnológico y la formación de capital humano para todos los tipos de energía.
También acordaron suscribir en el futuro inmediato un acuerdo para el uso pacífico de la energía nuclear.
Finalmente Coldwell mencionó que en el 2016, el comercio transfronterizo en materia energética entre México y Estados Unidos alcanzó los 39 mil millones de dólares.